jueves, 23 de febrero de 2017

Huir




Si pudiera estar en un lugar
y que nada me toque
Yolanda Pantin

“indio” ven y toma tu cerveza
Caupolicán Ovalles

Huir hacia adelante
            salir por la ventana
Mirar el paraíso
            que fuimos (que somos)
el árbol la montaña el nido
el cuerpo sin espejo

Huir hacia adelante
hasta encontrar
al hombre de la pipa
al pirata del loro al hombro y el tonel de ron
al leñador del bosque
al pescador de río
a Alicia o Caperucita
regresando a su arboleda
a Magdalena en el jardín del resucitado

Perseguir la paz a todo trance

Huir hacia el pasado
por la puerta trasera
Mirar la infancia
detenida en el instante
los espectros las voces familiares
los lugares hollados

Huir a la palabra
al corazón rebosante de emociones
a la tarjeta postal
a la fotografía sepia

Buscar amor a todo trance
Buscar raíz a todo trance

Huir al sótano
a las profundidades del presente

Salir sin salir

Entrar en todo caso
a la vida
que acoge la palabra
con su dosis de miedos y de culpas
con su carga de sueños y nostalgias

Entrar
a la vida
que trae sus novedades

y a fin de cuentas
ya no engaña